Piedra y Acero

Mi foto
Soy como la PIEDRA: firme y resistente,... pero me deshago en ensoñaciones, y ¡me agrieto por contarlas!, por ayudarlas a escapar, a escurrirse como el ACERO fundido; relatando, en su huida, vidas inventadas y verdaderas mentiras.

23 de junio de 2013

Golpe de suerte


Me quedé mirando a sus ojos mientras le meaba. Asomaban rabiosos entre trasquilones repeinaos de niño rico. 
Águs había sido un chaval normal hasta que murió su padre. Recuerdo que vivía al final de mi calle, junto a los huertos, en una chabola sin humo en la chimenea, sin cartones en las ventanas ni chucho a la puerta… Hasta ese mal día en el que su tío, por parte de madre o de padre o vaya usté a saber por parte de quién, vino a desbaratarlo todo. Llegó con su carromato a reventar, renqueando entre la polvareda: inflando envidias. 
Decían que vivía de noche, que no era de buena calaña. Decían que acabaría mal, que no era de fiar. Decían y decían a sus espaldas… (soniquete de afilador que nunca termina de llegar), pero todos le rondaban como gatos lameculos recogiendo migajas. 
Águs cambió de ropa, de gesto y de amigos. Creció para andar a la par que su tío, vociferó para alargar su eco, fumó para imitar su aliento… Quizás la envidia acelere mi lengua, pero nunca enturbió mi olfato. 
Ayer me echó de su puerta a puntapiés blancos. Nos miramos… Levante mi pata y salpiqué sus zapatillas nuevas. Agustín, sin parpadear, ¡silbó! Una bestia de colmillos relucientes me obligó a correr. En el basurero me escabullí, dejándole con su mordisco por estrenar... Babeando de alegría comprendí que la suerte seguía en mi barrio. 

Petra Acero (23/06/2013) 

Este es mi soplo para el Vendaval de Microrrelatos 2013 , que está teniendo lugar hoy, ahora... en toda la blogosfera terrícola!!
 

18 de junio de 2013

Una foto/un micro (8)


—¡Mapirosas, mami! ¡Mapirosas! 
—¡Ma-ri-po-sas! 
El pequeño aplaudía y aplaudía... Lo que debió de animar a la pareja de lepidópteros, pues se entretuvieron revoloteando entre nosotros, rozando mi libro una y otra vez, como aviones de reconocimiento tuneados para llamar la atención: ¡todo un despropósito! 
El codazo me molestó. Carraspeé y miré de reojo la torpeza de la madre. Me pareció que revolvía la sillita como si hubiera perdido al niño. 
—Ma-ri-so-pas —repetía el pequeño— ¡Marisopasss! 
—¡Señora, tenga cuidado!... ¡Que no está sola en el banco! —me quejé girándome hacia ella. 
En ese momento, malcolocó una visera sobre la cabeza pelirroja de su hijo, pidió disculpas al aire y se agarró a su bastón metálico. 
—Mariposas, cielo. ¡Ma-ri-po-sas! —continuó su enseñanza maternal. Yo cerré el libro.

Petra Acero (11/06/2013)


Hoy en Microrrelatos al por Mayor, uno de los blogs de Luisa Hurtado, disfrutando de las hermosas mariposas que José Luis Rafael inmortalizó en esta fotografía...


7 de junio de 2013

Ilustradora


Soy Amparo Martínez Alonso, y me gusta mi trabajo: dibujante publicitario.
Tengo una vida llena de dibujos. Siempre me recuerdo dibujando. La verdad es que me recuerdo poco. Con una memoria fotográfica y mis ojos miopes, parpadeando con interés desenfocado, recuerdo escenas, imágenes, flashes de una niñez de lápices de colores con olor a sacapuntas. 
Recuerdo premios en el colegio, ceras, pastel y témperas; recuerdo el frutero de la cocina a acuarela y plumilla; recuerdo a mi hermana posando mientras dormía; recuerdo premios provinciales con mariposas, hojas sin árboles y un don Quijote con su Sancho Panza; recuerdo la academia, los apuntes de desnudo a carboncillo y sanguina; recuerdo premios a óleo y exposiciones; recuerdo dibujos animados, “Lápices de colores”, para TVE; recuerdo felicitaciones, diplomas… Pero, todo esto, lo recuerdo cuando pienso en el pasado, como ahora.
Yo prefiero el día a día, vivir a todo color, a cuatricomía.



Hoy, en Despojos del REC, una página que animo "encarecidamente" (sin coste alguno) a visitar, por su valía en letras e ilustraciones, me correspondía presentarme como dibujante (participo en ambas categorías). Así dejaba algunos de mis recuerdos ilustrados: pocos, ¡vivo más el presente! Y mi blog es parte de ese presente. 

3 de junio de 2013

Un balón por estrenar



Me sonó a blasfemia. Le sonreí recordando… los curas, el colegio, las zancadillas, el cinto, el aceite de ricino, los misterios dolorosos; los amigos, las peleas, el recreo, la onza de chocolate, las enaguas de la Luisa, los misterios gozosos… Espantó las palomas y se acercó a mi banco desmigando su sermón.
—¿No me oyes, abuelooo? ¡ESTÁ-PROHIBIDO-DAR-DE-COMER-AL-ESPÍRITU-SANTO!
Se alejó a carcajadas, pateando su balón reluciente. La cabeza gacha y las manos solitarias. Entre el enrejado de sombras primaverales, esquivó juegos, risas y el polvo del parque…
Revoloteando, mis palomas nublaron su soledad.

Petra Acero (03/06/2013)