"Los monstruos del pasado acechan al presente del
indicativo"
“El miedo no deja de observarme, rasga mis mejores
propósitos"
(Amparo Martínez Alonso)
“Las palabras con puntos suspensivos resultan aderezadas con
guisantes“
(Ramón Gómez de la Serna)
Estas dos ilustraciones son con las que he participado en Una idea, Mucho arte. Un ejercio divertido de dar forma a guegerías conocidas o inventadas, y en el que he estado super-bien acompañada,... como casi todos ya sabéis.
Me gustan las greguerías tuyas, la de Don Ramón y -en especial- las ilustraciones, Petra.
ResponderEliminarUn gusto venir a visitarte.
Abrazos,
Un gusto que te gusten, y sobre todo ver tu cara por aquí, Pedro.
EliminarMuchas, muchas gracias por comentar siempre.
Un beso grande.
Petra:
ResponderEliminarMuy buena entrada y excelentes ilustraciones.
Ese ojo atávico mete miedo, de verdad lo digo.
Un gran abrazo.
Arturo, eres muy amable. Sabes que me alegra mucho que te gusten mis dibujos. Vuestros comentarios siempre incentivan.
EliminarUn fuerte abrazo.
Me gusta esta: Los monstruos del pasado acechan al presente del indicativo.
ResponderEliminarbuenas noches vaquera.
A mí también, Akaki. El presente es consecuencia del pasado... Influye, hasta en nuestra forma de ser.
EliminarMe alegra verte por aquí, querido vaquero.
Un besitooo
Qué bueno. Me encantó la primera y la ilustración del ojo, tremenda! Saludos van, Petra!Sos genial
ResponderEliminarMil gracias, Sandra. La primera tiene más sentimiento, al menos así ha surgido: de mis miedos, de mis aprendizajes, de mis dudas, de mis desilusiones, de mis pérdidas...
EliminarUn montón de besosss
Petrerías...
ResponderEliminarDespués de leerte el miedo lo tengo yo.
Desde el cariño eh...
ja, ja, ja. Me ha encantado tu palabreja, Toro: "PETRERÍAS". Me lo quedo. Cuando me digan que qué cosas tengo, que eso solo se me ocurre a mí, les diré:
Eliminar-¡Claro, es que son "petrerías", son cosas mías!
Siempre te leo desde el cariño.
Besos y besos.
Me gustan más las tuyas, en serio. A los guisantes... les falta un hervor para que me gusten.
ResponderEliminarEn cuando a las imágenes, mis preferencias son justo al revés. Son unos guisantes preciosos, fantásticos
Seguro que Gómez de la Serna tiene muchas greguerías mejores, pero me apetecía dibujar unos simples guisantes, unos guisantes que llamaran la atención del espectador, pues, los pobres, siempre pasan tan desapercibidos...
EliminarBesosss, Luisa.
Pero qué bien dibuja esta muchacha. Habrá algo que haga mal, digo. Yo me quedo con ese ojo y "los monstruos del pasado...". Por ejemplo: trabajo, estudio, sano, totalmente acechados". Venga, suerte.
ResponderEliminarXimens, muchas gracias.
EliminarEl otro día miré, por si te veía, en Fuentetaja :-)
Besoooos
¿Qué decirte que no haya dicho Petra? Pues que el ojo me sigue a todas partes y estoy por rasgar el papel a ver qué encuentro. Nunca veo los guisantes en plenitud por culpa del ojo. Es un trabajo minucioso como ya te dije, que admiro mucho.
ResponderEliminarBesos desde mis palabras y ¡suerte!.
Pues me gusta mucho el primero, Petra. Y de ilustraciones, las dos, pero sobre todo, la segunda.
ResponderEliminarUn abrazo, Amparo.
Me ha gustado la del monstruo. Parece que me está mirando. He apagado el ordenador y sigue apareciendo en la pantalla. Me temo que se ha quedado en mi presente.
ResponderEliminarBesos.
Dos grandes textos. El primero lo considero más greguería que el segundo, pero con los dos he disfrutado.
ResponderEliminarHe permanecido alejado unos días, pero leyendo, leyéndote.
Un beso.
¡Vaya! dos buenas ilustraciones las tuyas, ese ojo la verdad es que se queda en la memoria.
ResponderEliminarBesitos
Los textos magníficos. No he participado en la iniciativa, voy como una moto, no llego a todo, pero te leo aunque no comente.
ResponderEliminarUn abrazo,
Las dos greguerías me gustan. En cuanto a los dibujos, el del ojo me impresiona un poco. Parece el ojo de una persona, metido en el rostro de un animal, por ejemplo un perro, que se quiere asomar o esconder detrás de ese papel rasgado.
ResponderEliminarY el de los guisantes, muy bien. Y la de Ramón Gómez de la Serna, me gusta y estoy totalmente de acuerdo con su idea. En mi caso, los puntos suspensivos son recurrentes, los uso incluso aunque no vengan a cuento porque... me gustan. Por ejemplo, como ahora. Beso, Petra. Ana U.