Recuerdo que soñé con perritos que comían en mi mano, y me gustó. Uno canela y otro pardo, como los perros de mi vecina Vero. Me agaché para coger más pienso (tenía un saco lleno de comida para perros a mi derecha), pero cuando volví a extender la mano, se habían convertido en osos. No me extrañó, porque era un sueño, y esas transformaciones son normales… Por eso son sueños, porque pueden pasar cosas raras como en los cuentos. Los osos eran gordos y oscuros. El que iba a comer de mi mano, abrió la boca y me gruñó con dientes marrones de fumador. Quise correr, pero mis piernas no se movieron (esto también es muy normal en los sueños, y tampoco me preocupó). Lo que me alarmó fue que los dos tuvieran las caras de los amantes de la Vero: uno calvo y el otro bizco. ¡Me desperté sudando! Sabía lo que tenía que hacer. Por eso, cuando al día siguiente llegó el oso calvo, le estaba esperando en el descansillo, como de costumbre, pero esta vez le dejé pasar sin cobrarle la entrada. Mañana haré lo mismo con el bizco.
Mamá dice que los sueños cuentan historias. Historias que no nos atrevemos a creer despiertas. Los amantes de la Vero siempre han pagado religiosamente, pero nunca se sabe… Mamá es muy lista, y si ella cree que los sueños dicen la verdad, será por algo. Por eso seguimos esperando a papá, porque en todos sus sueños vuelve a casa… Aunque yo la oigo llorar… Seguro que es de emoción, al soñar que llega sano y salvo.
¡Genial,Petra!
ResponderEliminarBuena moraleja,la de esos sueños de la niña lista, inventándose una realidad al menos para ella más idílica
No sé si lo habré interpretado bien, pero así lo he visto yo.
Besicos escritora de altura.
nada como inventar realidades a nuestro gusto!!!
EliminarEl instinto de supervivencia es enorme, no sabemos cuánto hasta que no lo necesitamos... Y así debe ser. Quien se rinde: no lo cuenta (aunque sea un cuento).
Besoss, Carmencica (igual nos vemos pronto???)
Estos son de los cuentos que estoy siempre esperando leer en tu blog. Me ha gustado el registro, muy bien.
ResponderEliminarun saludo!
Lo he tenido que leer dos veces. Que talento!!
ResponderEliminarLos sueños son a veces tan reales!!!
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
Besicos muchos.
Calderón no tenía razón con aquello de "sueños, sueños son", al menos cuando uno es un niño. Es en esa etapa cuando los sueños emulsionan perfectamente con la realidad.
ResponderEliminarPrecioso micro. Un besote
El escritor es soñador por excelencia y los niños también.
ResponderEliminarConvertiste los sueños de una niña en una cruda madeja de pecado.
Excelente amiga que poder tienes para transmitir una historia con fantasía y drama a la vez.
Un abrazo.
Me ha gustado como relatas ese sueño.
ResponderEliminarBesos
Me gusta cómo te vales del recurso onírico para arañarnos el corazón con una historia de una considerable profundidad emocional, Petra.
ResponderEliminarUn micro que contiene más de una historia y que nos permite -como lectores- jugar a armar las tres tramas que nos regalas.
¡Brillante!
Un abrazo,
Petra,tu cuento es hermoso y nos hacen pensan.. ¿Qué nos dicen los sueños?Un beso desde Argentina Martha
ResponderEliminarLa Vero es fácil de conformar eh?
ResponderEliminarBesos.
Me ha encantado encontrar este espacio. Bonita entrada... Me ha evocado sensaciones especiales de imágenes de sueños. Un placer. Seguiré volviendo para leerte.
ResponderEliminarBesos.
Resulta muy tierna la voz de esa niña evadiéndose de la realidad a golpe de sueños. Me ha gustado mucho esta niña lista.
ResponderEliminarUn abrazo, Amparo.
Los sueños y el arte, siempre tan unidos.
ResponderEliminarMuy buen relato, me gustó, si señor.
Un beso.
HD
Qué bueno el texto!! Me gustó mucho.
ResponderEliminarMe encanta cuando me despierto y me acuerdo lo que soñé, lo cual no me sucede muy a menudo.
Saludos
No suelo recordar mis sueños y prefiero que sea así... Cuando los recuerdo no suelen ser muy agradables.
ResponderEliminarMe gusta tu sueño, me gusta la mezcla que haces de sueño-realidad.
Besos desde el aire
La Vero, la madre y el padre ausente o que no existe, la niña lista. Me llevas a un entorno de pobreza y miseria, patio de vecinos que asumen la prostitución como medio de vida. Me llevas al temor de la niña a esas miradas de los amantes. En fin, una maravilla de viaje, con la voz infantil conseguida y una estructura narrativa muy conseguida, distinta. Felicidades.
ResponderEliminarUn cuento que te deja un nudo en el pecho, las ganas de salir por ahí a hacer realidad los sueños de las personas que se aferran a ellos para no sucumbir... Excelente texto.
ResponderEliminarYo pocas veces recuerdo lo que sueño, así que me conformo con leer sueños de niña lista en tu blog.
ResponderEliminarUn beso.
Petra me gusta tu relato, perros que se convierten en osos aunque en realidad son los amantes de la Vero.... me encanta ese ir y venir del sueño a lo real.
ResponderEliminarUn abrazo desde mi verde pinar
Grandiosa imaginación la tuya Petra con estas ensoñaciones a través de una voz infantil que nos muestra la miseria de una vida.
ResponderEliminarMe parece que lo has construído de una forma muy armoniosa para contarnos varias historias en una sola y he ahí su grandeza.
Felicidades por estos sueños llevados a papel, y un beso fuerte.