Se estiraba y encogía acompasadamente. Su movimiento monótono me irritaba. Arrastrada y peluda venía hacia mí. Retrocedí. Mi hermana pequeña me avergonzaba: no dejaba de comer y engordar.
⎯Tata, ta-ta-ta
Cada vez sonaba más cerca. No la quería a mi lado con su movimiento pesado y áspero.
⎯¡Para ya! No sigas acercándote. Come, engorda y calla, pedazo de... oruga.
Siempre estoy sola. Seguro que mis amigas también se sienten incómodas a su lado...
¿A quién le gusta recordar posturas elementales, frente a acrobacias etéreas, armónicas, sutiles? ¿Quién come hierba cuando puede libar el néctar de las flores más exquisitas?
¡Se acabó! Volaré hacia un mundo distinto, sofisticado; hacia un ambiente de formas sugerentes, delicadas; de superficies brillantes, suaves... Donde nada me recuerde arcaicas situaciones familiares.
¡Se acabó! Volaré hacia un mundo distinto, sofisticado; hacia un ambiente de formas sugerentes, delicadas; de superficies brillantes, suaves... Donde nada me recuerde arcaicas situaciones familiares.
Petra Acero (29/11/2012)
Sin querer emular a ninguna mariposa presumida de estas tan desagradables y engreídas,... solo con intención de mudar el cascarón y estrenar escritorio. Besos, amigos perseverantes.
Adios familia de orugas... y se convirtió en una taruga.
ResponderEliminarBesos.
Exactamente, Toro, y además fue a parar sobre una oruga de mentira (de tazas de colores).
EliminarBesos azules, rojos y verdes.
Los cambios sirven para crecer. Tu metamorfosis me gusta Petra.
ResponderEliminarUn abrazo
A mi me da miedo "cambiar", pero es necesario. Aunque en el fondo, sssssssssssssssiemppre conservo mis orígenes. Soy como una niña, un poco oruga y mariposa.
EliminarGracias, Paloma.
Besos de colores (como el fondo nuevo)
Petra Acero:
ResponderEliminarEn algún momento, todos quieren (o al menos intentan) volar.
Esas mariposas, se sabe, son de vuelo corto; pronto caen en la red de la cotidianidad.
La ilustración de la oruga de tazas, con su mariposa al tope, es muy acertada.
Muy buen relato, también.
Un gran abrazo.
Arturo cómo me gusta que hayas visto esa "oruga artificial" de tazas. Al final buscamos nuestros orígenes sin darnos cuenta... Lo familiar reconforta, da seguridad.
EliminarMuchas gracias.
Un beso azul de mariposa, y verde y rojo del fondo nuevo.
Para empezar, el cambio de look es muy bonito, así como tu relato. la metamorfosis de esa oruga-mariposa. Podría pasar por esa tontería de los adolecentes, ¿no crees? y que después suele pasar.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Hola Casa Encendida. Muchas gracias. Me encanta el nuevo fondo, cuando aparecen esas luces de colores en la pantalla nada más abrirse la página:-)
EliminarEl relato, como señalas, puede hablar de esa metamorfosis de los adolescentes (¡Uf!, cuando hay que sufrirla como padre es terrible...), que afortunadamente se estabiliza, se equilibra y madura, pero que mientras tanto les hace buscar otras "tazas de colores" sin darse cuenta que dibujan una simple "oruga", como de la que tratan de huir o apartanrse.
Besos a cuatro colores.
De entrada, me gusta mucho tu nuevo look, chica. Y ahora voy a leer.
ResponderEliminarAy, a quién me recuerda esta mariposa? No se puede evolucionar sin renegar de nada? Yo tenía un profe que me decía: no te olvides nunca de quién eres ni de dónde vienes, qué listo era el tío.
Un abrazo, Petra.
Pienso como tu profe, ¡claro que sí!
EliminarLos orígenes son muy importantes y la familia... Yo estoy muy orgullosa de ellos, y creo que se me nota enseguida.
Besos, besosss
Muy buen cambio amiga, el relato me pareció fabuloso, una metáfora sutil. (aunque no entendí nada)¿que pasa con las tazas? ¿se olvidaron de lavarlas?
ResponderEliminarNo importa ya lo voy a entender.
Un renovado abrazo amiga.
Moli, mira que eres... Las tazas forman una gran oruga. Justo de lo que la engreída mariposa huía (los orígenes, de los que se avergonzaba).
EliminarUn beso de mil colores para ti :)
Moli, acabo de leer tu mail. ¡Que envidia me das! Ahí te he dejado mi contestación.
EliminarBesos para el grupo.
Petra, me gusta el cambio que has hecho.
ResponderEliminarYa lo dice el dicho: "Renovarse o morir"
Te sigo, aunque no tengo mucho tiempo para comentarte.
Saludos
Muchas gracias, José Ángel.
EliminarEl tiempo y las prisas... Te entiendo perfectamente.
Un beso multicolor (como el nuevo fondo del blog)
Cambios, cambios...siempre arriesgados, muchas veces necesarios.
ResponderEliminarMe gustó.
(el cambio en tu blog, también)
Un beso.
A mí me imponen. Me gusta cambiar para notar que cada día es nuevo, pero por otro lado la cotidianidad me da seguridad. Una dicotomía que prefiere solventar con "nuevas historias" que no cambien mi vida, solo en la ficción (soy un poco cobarde, ¿no?).
EliminarBesos a cuatro colores.
De oruga a mariposa, y cambio de look.
ResponderEliminarNo sé que vamos a hacer contigo porque... ya nos gustabas antes, cantidad.
Un besote
Jajajaja. Pero que maja eres, Luisa. Tú sí que haces que una se sienta mariposa... y revolotee trazando líneas de colores de amaneceres o degradados de atardeceres, de libros encantados, de niebla hambrienta, de peceras transparentes, de mapasmundis sin árboles y de ordenadores ecológicos, de playas contaminadas u homínidos asesinos.
EliminarGracias por permitirme colorear relatos magníficos de amigos ecologistas...
Besos de mil colores.
Un cambio muy luminoso Petra. Las orugas también tienen su encanto...
ResponderEliminarBesos desde el aire
Las orugas son promesas de bellas mariposas. Sin ellas no habría mariposas presumidas para avergonzarse de sus orígenes. Por eso es tan significativo que haya elegido a esa enorme "oruga de tazas" para posarse: la forma de la que trata de huir, de la cual reniega.
EliminarBesos multicolores como el nuevo fondo.
Creo que todos pasamos por el porceso, aunque no lo deseemos. primero, cuando nacemos, somos torpes orugas. Después nuestro espíritu se remonta y solo algunos alcanzamos el grado de sutil y preciosa mariposa....
ResponderEliminarBesos.
Llevas mucha razón, Moderato. Y el escribir nos permite volar un poco más alto, y planear o hacer piruetas en el aire... Me gusta volar sin tener que levantar los pies del suelo, como una mariposa intrépida de mentirijillas.
EliminarBesos de mil colores para ti.
Te mandé un email, lo has visto?...:)
ResponderEliminarVoy corriendo a leerlo (hace unos días que no miro el correo personal)...
EliminarBonita historia la de la mariposa engreida, que cuide su belleza, ya que a los ojos de cualquier caprichoso es más atractiva. Mientras la hermana, se pondrá tibia de lo que pille, que ya llegará su hora.
ResponderEliminarLa foto está genial y tu nuevo look, jovial.
Un beso.
Gracias Enmascarado. Muy buen comentario. Que la oruguita coma mientras pueda (que se ponga tibia) que luego, con los años solo querrá adelgazar para estar a la moda...
EliminarBesos en cuatricomía.
Bien por la oruga y por el cambio, Petra. Felicidades!!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Hola, Fernando. Bien por la naturalidad y la evolución, ¿no? Las orugas terminaran siendo mariposas, todo a su tiempo, y evolucionar es experimentar, probar, crecer...
EliminarBesos de colorines, colorado :)
Buen look, amiga Petra!!. Este es tan acogedor como el anterior, y creo que sabré encontrarme y encontrar tus letras, sean de orugas, mariposas o metamorfosis encubiertas.
ResponderEliminarMe gusta y creo que está muy bien eso de renovarse para el comienzo del año... puede que cambie alguna cosilla yo también. ;)
Besos amiga.
Me pareció que comenzar el nuevo año era un buen momento para una pequeña metamorósis. Sin olvidar mi estado de oruga, de aprendizaje, de encuentros, de engorde bloguero sano para ir desarrollando alas.
EliminarUn beso a cuatricomía, querida Laura.
Lo que más me ha gustado es la foto Petra, de las tazas de café en distintos tonos azules.
ResponderEliminarHace juego con el color de la mariposa de color azul.
Ahora vuelvo.
Pobre mariposa engreída, se conviertío en sal al mirar hacia su pasado, se perdió en su pasado, se posó en una oruga gigante, olvidándose de otros trabajos, más nobles,debió de posarse sobre alguna bonita flor y !!!empezar a trabajar ya¡¡¡
ResponderEliminarY no andarse con tantas comtemplaciones.
¿Creo que confundió la flor con las tazas luminosas de color azul?, tan brillantes y lisas.
Creo que se estrelló la pobre mariposa.
jajaja.
Siempre haciendo reir al personal.
Bueno, fue un cuento de ¿color azul? .
Saludos, muy ingenioso.
Gracias, Amapola Azzul. Me imagino que el azul es tu color preferido... A mí me encanta el azul y el rojo y al amarillo y el negro... y todos se potencian por contraste, y mezclando pequeñas cantidades de estos primarios podemos conseguir el resto de colores.
EliminarMe alegra tenerte aquí, Amapola Azzul. Ya tego 2 amapolas. Me gustan las amapolas.
Un beso multicolor, para ti con mucho azul.
Bueno, mis colores preferidos son muchos, es verdad el azul, pero también el blanco y el rojo.
EliminarBueno muchos más. Besos a tí.
Pero el azul me encanta.
Me encanta el nuevo look. Más alegre y luminoso. Bien por el cambio.
ResponderEliminarY, como tu no das puntada sin hilo, el tema de tu micro también nos habla de renovación. Me gustan esa mariposa que se atreve a romper con lo cotidiano y ese !se acabó! tan rotundo. A las amapolas ROJAS nos ocurre lo mismo: No nos atrae aquello de "más vale malo conocido que bueno por conocer". Es enriquecedor arriesgar y volar hacia mundos distintos.
Besaaazooos.
A mí también me parece luminoso. Me encanta ver esas luces de colores al abrirse la pantalla.
EliminarLa mariposa rompe con su psado, pero se posa sobre una gran oruga de tazas azules (la forma de la que huye y se avergüenza). Los orígenes marcan al fin y al cabo...
Amapola, tú eres muy intrépida ("más vale malo conocido que bueno por conocer" es tener miedo al cambio, a arriesgar, y eso no va contigo: ¡me alegro! Yo no puedo decir tanto).
Tú, tampoco das puntada sin hilo...
Besos de mil colores, Amapola Roja.
Gracias por asomarte a mi nueva ventana.
Y sin embargo la etapa en la que somos orugas es tan hermosa...
ResponderEliminarUn beso.
HD
Estoy de acuerdo, Humberto. Todos los inicios son importantes, duros, pero llenos de ilusión, fantasia y futuro. Los conocimientos, la vida nos van reconduciendo, nos obligan a rectificar actuaciones o planes, y también a disfrutar de premios y logros. La vida de cualquier mariposa es lo que es gracias a todo el engorde "antiestético" de la oruga inicial .
EliminarUn beso lleno de luz y colores renovados, Humberto.
Me gusta tu cambio de imagen y tu micro. Es importante no olvidar los orígenes, claro que sí. ¡Cómo no va a estar sola siempre! Tiene más de un problema esta mariposa. Siempre nos dejas algo para reflexionar un rato.
ResponderEliminarUn abrazo
Precioso relato captando la psicología mariposil.
ResponderEliminarY el nuevo formato está genial. ¿Cómo era antes?
Besos Petra
Buen cambio, no está nada mal para iniciar el nuevo año bloguero. ¡Me gusta!
ResponderEliminarBesitos